Si ya llegaste a cierta edad y quieres estudiar, seguro que te es difícil tomar esa decisión. Lo más probable es que tengas una vida formada con un trabajo, una familia que cuidar, algunas deudas y una cantidad de actividades que cumplir a diario. Todos esos aspectos los tienes en tu mente a la hora de pensar en estudiar cuando eres mayor.
Por otra parte, tienes innumerables razones por las cuales quieres estudiar. Puede ser que quieras retomar esos estudios que nunca terminaste cuando eras joven.
A lo mejor quieres cambiar de profesión, porque la que tienes no te gusta o no cumple con tus expectativas. Tal vez estés pensando en especializarte y hacer un máster. O simplemente no tuviste la oportunidad de realizar una carrera universitaria y ese siempre ha sido tu anhelo más profundo.
Resulta lógico que estés pensando en los pros y contras, pero aquí te decimos que nunca es tarde para comenzar a estudiar.
Para ayudarte a decidir aquí se exponen los aspectos favorables de estudiar cuando ya se es mayor y algunos consejos útiles para que puedas cumplir con tus obligaciones y a la vez logres culminar tus estudios.
Cuando termines de leer este artículo estarás más que convencido de comenzar a cursar la profesión de tu preferencia.
Como ya se dijo, nunca es tarde para comenzar a aprender una nueva profesión. Por otra parte, algunos se estarán preguntando si las ventajas de este nuevo emprendimiento serán mayores que los contras.
También estarán pensando si todo esto traerá algún beneficio para nuestros seres queridos.
Analiza las ventajas que se exponen a continuación y decide tú. Seguro te llevas una grata sorpresa.
Resulta claro que aprender a cualquier edad trae innumerables beneficios para el cerebro. El hecho de estudiar ayuda a mejorar la memoria y nuestra capacidad cognitiva. Es por ello que muchos especialistas recomiendan realizar actividades similares para prevenir el Alzheimer y la demencia.
También mejora la toma de decisiones y la resolución de problemas. Nuestro cerebro funciona de tal forma que cuando aprendes algo nuevo desarrollas nuevas células nerviosas (neuronas) y construyes nuevas conexiones (sinapsis) que son las encargadas de volvernos más inteligentes.
En cuanto al desarrollo emocional, este se beneficia notablemente cuando se estudia. Ya que, al realizar nuevas actividades, creas y mejoras las asociaciones mentales. Con ello desarrollas la creatividad y mejoras la resiliencia (capacidad para enfrentar los obstáculos y problemas).
También aumentará tu autoestima al sentir que puedes enfrentar las situaciones que se te presenten. Muchos psicólogos aseguran que cuando estudias se desarrollan las emociones de bienestar y asumes una actitud optimista ante la vida.
Se observa cómo el mundo laboral cada día se vuelve más competitivo. Es evidente que al estudiar una nueva profesión o perfeccionar la que ya se tiene con un máster nos traerá muchos beneficios. En este sentido, seguro lograrás un ascenso o conseguirás un mejor empleo, lo que se traduce tanto en crecimiento personal como económico.
Es un hecho que cuando comiences a estudiar vas a conocer mucha gente nueva, sobre todo si estudias en forma presencial. Seguro conocerás personas de otras culturas y edades.
No te preocupes por los jóvenes, ellos se acercarán a ti y tu a ellos de manera natural, además te respetarán por lo que estás haciendo. También conocerás a personas mayores de tu edad que están realizando estudios igual que tú y a muchos profesores.
Por otra parte, si estudias online también podrás relacionarte con los compañeros de curso y profesores vía Internet. Y quién sabe a lo mejor algún día decidan reunirse y conocerse mejor en persona.
Cuando retomas tus estudios o comienzas otros te conviertes en un ejemplo para tus hijos, nietos y personas jóvenes que están en tu entorno. Y por qué no, también para tu esposo, hermanos y padres.
Es así como ellos van a observar que, a pesar de todas las adversidades que pudieron ocurrirte, tú saliste adelante y triunfaste.
Cuando se llega a la edad adulta y a la vejez nos preguntamos si tendremos la capacidad de lograr instruirnos formalmente. Y lo que es más importante, si vamos a poder culminar con lo propuesto. Es por eso que estudiar a esta edad puede asustar un poco.
En tal sentido, para despejar todas esas preocupaciones, a continuación se ofrecen varios consejos para que puedas estudiar fácilmente y logres tus objetivos.
Recapitulando, comenzar o volver a estudiar cuando se es adulto trae muchos beneficios a nivel cognitivo, emocional y de superación personal. También podrás mejorar tu situación económica y social.
Y con ello te convertirás en un ejemplo de superación que beneficiará a hijos, jóvenes, familiares y amigos de tu entorno.
Por otra parte, ya te diste cuenta que no hay excusa. Todo se puede lograr con un poco de esfuerzo, planificación y organización.
Por último, es importante resaltar el papel de la familia y amigos cercanos, quienes deben estar de acuerdo con que realices esta nueva tarea.
Además, deben ofrecer su apoyo en los momentos difíciles al igual que celebran de tus triunfos. Para finalizar, recuerda nunca es tarde para cumplir tus anhelos y comenzar a estudiar.